La caja de pensar

 

Al leer la entrada de La caja de pensar, sobre todo la entrada de Los paradigmas de Kuhn, el primer paradigma que me vino a la mente fue el descubrimiento de los virus. Se creía que los agentes infecciosos más pequeños eran las ya conocidas bacterias, Ciencia normal según el concepto de Kuhn. En 1796, el médico británico Jenner fue el que desarrolló la primera vacuna contra una enfermedad vírica, la viruela. Pero al igual que Pasteur que unas décadas después desarrolló la vacuna contra la rabia, no conocían contra qué tipo de agente infeccioso trabajaban. Pasteur creía que se trataba de un patógeno más pequeño que las bacterias ya que no podía ser detectado por un microscopio. Siguiendo la relación con el Ciclo de Kuhn, es el comienzo de la aparición de anomalías.

Chamberland, asistente de Pasteur, inventó un filtro de porcelana cuyo poro no dejaba pasar a bacterias con el objetivo de producir agua libre de bacterias para los experimentos. En 1892, Ivanovsky estudiaba una enfermedad que afectaba a la planta de tabaco que se extendía con gran rapidez y producía grandes pérdidas. Esta enfermedad se denominaba “Mosaico del tabaco”. Molió las hojas con síntomas, las pasó por el filtro de Chamberland y observó cómo seguían siendo infecciosas. Por lo que demostró que el agente infeccioso no era una bacteria o al menos no una convencional. Crisis del modelo, hay que buscar respuestas.

El neerlandés Beijerink es el investigador que replicó el trabajo de Ivanovsky volviendo a confirmar que la planta infectada con la enfermedad del Mosaico seguía siendo infecciosa tras ser filtrada. Además, demostró que la infección podía transferirse a otras plantas de forma serial. Se le atribuye que fue el primero en nombrarlo como “virus” que significa “veneno”. Comienza la Revolución hacia el nuevo paradigma.

A pesar de los errores en sus conclusiones, dieron lugar a una rama de la ciencia la virología siendo el virus del mosaico del tabaco el primer virus identificado en la historia. Tras él, comenzaron a descubrirse otros en animales y humanos. A principios del siglo XX, junto con el desarrollo de nuevas tecnologías se logró observar la compleja estructura de los virus. Gracias a este nuevo paradigma se descubrió la causa de misteriosas enfermedades.